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La Xunta de Galicia y el Ayuntamiento de Cervo colaborarán en el acondicionamiento de una plaza en el barrio de la Atalaia, tal y como establece el acuerdo suscrito esta semana por la conselleira de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez, y el alcalde, Alfonso Villares.

Esta actuación urbanística tiene como objetivo derribar una edificación para transformar ese espacio en una plaza con la que se ampliarán los espacios públicos del ayuntamiento. Además, se prevé la posible utilización del sótano como un futuro aparcamiento. Las obras dispondrán de una inversión total de más de 536.000 euros, del que la Xunta acercará el 70% y el ayuntamiento, el 30%.

El proyecto pretende conservar los muros de contención, que, junto con una serie de pilares, servirá de apoyo para un forjado reticular que soporte el uso público y los elementos de jardinería. La decoración de la plaza tendrá como referentes la caza de las ballenas y la cerámica de Sargadelos. De hecho, el nuevo muro y el banco corrido se revestirá con un mural con restos de cerámica.  Además, el desnivel de la zona noroeste se salvará con unas gradas que permiten contemplar la zona arqueológica del otro lado de la calle.  

La zona ajardinada representará una ballena hecha con tierra vegetada. La ballena se delimitará con acero corten.

A mayores, se demolerá la acera del lateral noreste y se pavimentará igual que la calle.

Las tareas de reforma se acometerán al amparo del plan Hurbe, un programa que este año cuenta con un presupuesto reservado de 7 millones de euros y que el Gobierno gallego promueve desde hay más de una década para ayudar a las administraciones locales a ejecutar este tipo de proyectos.

Hace falta recordar que este plan refleja el compromiso de la Xunta a la hora de ofrecer su apoyo a las entidades locales y promover actuaciones que, en la línea del acondicionamiento previsto para Cervo, contribuyen a dinamizar las villas gallegas por medio de la mejora de sus equipaciones y servicios públicos.